No es el primer post que escribo desde el Netbook, ni desde otro sitio que no sea el escritorio, pero si el primero que escribo desde el baño. No es cómodo y seguramente lo termino desde otro sitio, si los retortijones me dejan. Tras varias visitas al médico (os resumo la historia para los que no me conocéis). En Junio tuve una piedra en el riñón, tras expulsarla (no dolió expulsarla, sólo hasta que llegó a la vejiga) una ecografía en una clínica privada me indica que tengo piedras en un y posiblemente más en el otro. De ahí me mandan a una radiografía que me indica que no tengo nada. Y para terminar me dice que si me quiero someter a un contraste que es una prueba para salir de dudas. Bueno, pues adelante.
Una Urografía Intravenosa suena aterrador pero no es más que inyectar Iodo en las sangre y ver como lo elimina el cuerpo mediante una serie de radiografías. La prueba en sí, no duele ni tiene efectos secundarios. Pero su preparación para la prueba si tiene efectos... laxantes. Al menos para mí, una persona que va regularmente al baño, el laxante que me largaron, me tuvo toda la tarde, parte de la noche y parte de la mañana siguiente. Tuve tiempo de empezar este post allí, de limpiar el baño, etc...
A la mañana siguiente voy al hospital, En ayunas desde las 12 de la noche anterior. No se puede beber ni agua. Me pasan rápido, y me dicen que orine todo lo que pueda. No sale nada, por delante, pero si por detrás. Me subo a la cama y me hace 10 radiografías. A continuación, mete tripa que te ponen un cinto que te aprieta bien los riñones. No aprietes más que me cago encima. Uf! por poco. Primera parte de la prueba terminada. Las palabras del operario no se me olvidan:
- Desayuna, sube a desayunar, COME LO QUE QUIERAS, y luego te bebes un litro y medio de agua, ni más, ni menos, y cuando tengas muchas ganas de orinar, avisas y te pasamos.
Me voy al Metadona (Mercadona) y me compro un bocadillo de jamón serrano, y una botella de litro y medio. Me lo zampo y a esperar. Pasa una hora , con un mal cuerpo, me siento raro pero no tengo ni ganas de orinar. Una hora más tarde sale a preguntar, pero no tengo muchas ganas. Me dice que cuando salga la chica que acaba de entrar, que sale a por mi. Es cerrar la puerta y me entran unas ganas horribles de orinar. No aguanto más, me han venido de golpe. Me tengo que poner a pasear cruzando las piernas, y me desabrocho el cinto, porque ya no aguanto. Me nos mal que no tardó más de 15 minutos. Espero que cuando me den los resultados en Marzo, haya merecido la pena.
En resumen, en el hospital lo pasé mal apenas un cuarto de hora, pero los días previos se pasa peor, entre la dieta estricta, los laxantes, y el ayuno... vamos que no se lo deseo a nadie, ni siquiera a al más pesado de mis clientes.
Viendo la foto de nuevo, me pregunto si esto es a lo que se llama el concepto All In One o si tiene que ver más con la maldita polivalencia...
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Gracias por leerme.